X Conferencia de Ministros de Defensa de América ( 1º parte).

Las Malvinas ¿piedra de toque? 

¿Estados Unidos y Canadá se aislan de América Latina y el Caribe al negarse a considerar la soberanía argentina, y por lo tanto sudamericana, sobre las Islas Malvinas?  

Pepe Mujica

El Presidente de Uruguay y uno de los líderes más significativos de UNASUR, José Mujica, inauguró la X Conferencia de Ministros de Defensa de las Américas con un discurso en el que advirtió que la "gran guerra de la región es contra la desigualdad y la pobreza" y que es necesario “gobernar el mundo con otra mirada”.

Pese a ello y como ya ocurrió en la Cumbre de Jefes y Jefas de Estado americanos reunida en Cartagena de Indias, Estados Unidos y Canadá vetaron el tratamiento de la soberanía argentina y suramericana sobre las Islas Malvinas.

Sin embargo, el Ministro de Defensa de Brasil, Celso Amorin, en su primera intervención en la Conferencia, desconociendo el veto, sostuvo que “en el marco de cuestiones de defensa y seguridad, Brasil considera que la conferencia debe registrar las reivindicaciones de Argentina sobre las Islas Malvinas, como ya ocurrió en el MERCOSUR, la UNASUR y la CELAC”. Esto implica que la conferencia deberá votar acerca de Malvinas  y que los países de América Latina y el Caribe apoyarán lo moción de Brasil

Si persiste la oposición de Estados Unidos y Canadá es probable que la Conferencia no pueda emitir una declaración acerca de los temas para los que fue convocada -desastres naturales, misiones de paz, seguridad hemisférica y vigencia del sistema interamericano de defensa. América Latina y el Caribe no perderán nada, en tanto que Estados Unidos y Canadá habrán dejado pasar otra oportunidad para recomponer sus relaciones con el resto de América.

Varios países de la CELAC ya se han retirado del TIAR (Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca) y el fracaso de la X Conferencia señalará un paso más en el aislamiento de Estados Unidos y Canadá en el sistema hemisférico.

Esa política parece seguir los tambores del siglo pasado y no los del presente. América del Norte no puede desarrollar una política internacional sostenible sin dialogar con la América al sur del Río Grande acerca de los derechos e intereses de los latinoamericanos, que cada día consolidan más una visión unificada de los asuntos mundiales.

Y EEUU tampoco puede elegir Presidente sin contar con los ‘hispanos’ y sin que sus candidatos pronuncien discursos en castellano. Obama debió declarar públicamente su respeto por Hugo Chávez antes de las elecciones del 7 de octubre en Venezuela porque Chávez es una de las figuras de más prestigio entre la ciudadanía “latino” norteamericana. Y tal vez porque casualmente se llama como César Chávez, cuyo monumento inauguró ayer Obama. César Chávez fue el líder histórico de los hispanos, movilizó a millones en huelgas y actos reclamando derechos civiles y políticos y la magnitud de su figura es semejante a la de Martin Luther King.

Reconocer los derechos argentinos sobre las Malvinas podría contribuir entonces a que Obama gane las elecciones presidenciales y a que EEUU diera una muestra significativa a América Latina que está dispuesto a iniciar una nueva etapa de relaciones con el Sur.

FSM